De El cuidador de rebaños II Mi mirada es nítida como un girasol. Tengo la costumbre de andar por los caminos Mirando a derecha e izquierda, Y de vez en cuando mirando atrás... Y lo que veo a cada momento Es aquello que nunca antes había visto, Y yo sé dar mucho por eso... Sé tener el pasmo esencial Que tiene una criatura si, al nacer, Reparase de veras en que nace... Me siento nacido a cada instante Para la eterna novedad del mundo Creo en el mundo como en un malquerer Porque lo veo. Pero no pienso en él Porque pensar es no comprender nada... El mundo no se hizo para pensar en él (Pensar es estar enfermo de los ojos) Sino para mirarlo y estar de acuerdo... Yo no tengo filosofía, tengo sentidos... Si hablo de la Naturaleza no es porque sepa lo que es, Sino porque la amo y la amo por eso, Porque quien ama nunca sabe lo que ama Ni sabe por qué ama, ni qué es amar... Amar es la eterna inocencia, Y la ún
Mito, leyenda y poesía